Generalidades del tema
El azúcar alta en la sangre (hiperglucemia) se ve la mayoría de las veces en personas que tienen diabetes que no está bien controlada. Los síntomas del azúcar alta en la sangre pueden ser leves, moderados o graves.
Azúcar en la sangre levemente alta
Si sus niveles de azúcar en la sangre están continuamente por encima de sus límites ideales (generalmente de 200 miligramos por decilitro (mg/dL) a 350 mg/dL en adultos y de 200 mg/dL a 240 mg/dL en niños), tal vez tenga síntomas leves de azúcar alta en la sangre. Tal vez orine más de lo habitual si está tomando bastantes líquidos. Algunas personas que tienen diabetes quizá no noten ningún síntoma cuando su nivel de azúcar en la sangre se halla en este nivel. Los síntomas principales del azúcar alta en la sangre son:
- Aumento de la sed.
- Aumento de la micción.
- Pérdida de peso.
- Fatiga.
- Aumento del apetito.
Los niños pequeños no son capaces de reconocer los síntomas del azúcar alta en la sangre. Los padres tienen que hacerle a su hijo una prueba casera de azúcar en la sangre toda vez que sospechen que tiene hiperglucemia.
Si no bebe suficientes líquidos para reponer los líquidos perdidos por los niveles altos de azúcar en la sangre, usted puede deshidratarse. Los niños pequeños pueden deshidratarse muy rápidamente. Los síntomas de deshidratación incluyen:
- Sequedad en la boca y aumento de la sed.
- Piel tibia y seca.
Azúcar en la sangre de moderada a gravemente alta
Si sus niveles de azúcar en la sangre están continuamente altos (generalmente por encima de 350 mg/dL en adultos y por encima de 240 mg/dL en niños), tal vez tenga síntomas de moderados a graves de azúcar alta en la sangre. Estos síntomas incluyen:
- Vista borrosa.
- Sed extrema.
- Aturdimiento.
- Piel sonrojada, caliente y seca.
- Agitación, somnolencia o dificultad para despertarse.
Si su organismo produce poco o nada de insulina (individuos con diabetes tipo 1 y algunas personas con diabetes tipo 2), usted también puede tener:
- Respiración rápida y profunda.
- Frecuencia cardíaca rápida y pulso débil.
- Aliento con olor fuerte y afrutado.
- Pérdida del apetito, dolor abdominal y vómito.
Si sus niveles de azúcar en la sangre siguen subiendo, tal vez se vuelva confuso y letárgico. También podría perder el conocimiento si sus niveles de azúcar en la sangre suben mucho.